Es de agradecer a las organizaciones caritativas y benéficas de antaño, que la sociedad en general haya determinado que las personas y colectivos desfavorecidos estén especialmente protegidos en la actualidad, pues con sus actuaciones y recursos no solo han conseguido que la intervención que les es necesaria se llevara a cabo, sino también que la haya asumido el Estado.
Por sus manos han pasado a lo largo de los siglos los desheredados y pobres de solemnidad, tullidos e impedidos, enfermos mentales y crónicos, solitarios desamparados y población marginada, desarraigados e inmigrantes, dependientes severos por cuestiones físicas o psíquicas, niños, adultos y ancianos, nacionales o extranjeros, con familia o sin ella, arruinados o que ya nacieron en las ruinas, y así un larguísimo etcétera.
La historia de los Servicios Sociales refleja que es uno de los recursos públicos que indudablemente más ha crecido y cambiado, a lo largo de los últimos dos siglos, pasando de ser dirigido por entidades caritativas, generalmente al amparo de la Iglesia, a ser directamente gestionadas, con un “in crescendo” de ayudas públicas, por la Administración.
Esto, que no sucede en todos los lugares, se debe principalmente a la importancia que ha adquirido en nuestro medio el ser humano, tanto en general y como en particular. Asimismo, la vida en si, como bien preciado, a proteger y conservar, ha ido adquiriendo relevancia de manera que se ha creado un conjunto de estructuras dirigido exclusivamente a evitar la muerte y la enfermedad.
Esta sociedad, en el desenvolvimiento de los valores cristianos, ha decidido hace tiempo ayudar a los necesitados y desfavorecidos en las dificultades que cada una de sus circunstancias determina. Ha decidido oponerse a la lógica de la selección natural determinada por el darwinsimo, a la predestinación divina luterana, a la ideología de clases y a la filosofía que está detrás del fascismo y el racismo. Y a mí me parece que está muy bien.
No debe pasar desapercibido el tránsito conceptual que hemos hecho de la caridad a la solidaridad, que no es sino el paso de cumplir con una obligación moral reglamentada al de empatizar desde la ética con una situación social, aunque en ambas subyacen principios similares. Es el eslabón en la cadena de una sociedad clericarizada a una sociedad civil. La laicidad es una conquista social al evitar la intromisión de las creencias religiosas en el tejido y el funcionamiento social, pero también lo debería ser el superar el carácter doctrinario que lo acompañaba, y eso no está tan logrado. De hecho, ya se ve como detrás del laicismo subyace el auténtico espíritu anticlerical, que refleja en su estilo y postulados el mismo dogmatismo de la doctrina social de la que se pretende distanciar. Parecería como si el principal obstáculo en la búsqueda de las libertades individuales chocara desde siempre con un sentido excesivamente acusado de lo colectivo, ese que tanto calienta a todos los dictadores.
Para poder cuando menos paliar los déficits de estas personas, la sociedad en su conjunto debe hacer un importante esfuerzo para que las capas sociales que generan crecimiento y beneficio destinen una cantidad significativa de estos a dichos fines. Esto supone menor bienestar colectivo y mayor gasto social. Por eso, las ayudas que se dirigen a estos colectivos desfavorecidos deben ser entendidas como “riqueza retrotraída». Desde el abono transporte, hasta las ayudas al alquiler o a los suministros, pasando por los viajes de la tercera edad, y otras ayudas que no están especialmente reguladas por las entidades que las gestionan, debería estar en la conciencia de los ciudadanos que su gasto recae sobre los demás, y por tanto han de ser utilizadas con sentido de la responsabilidad.
La nociva concepción de estos privilegios como derechos adquiridos, en vez de como esfuerzos compartidos en un sentido de solidaridad cívica, fomenta su consideración de algo que nos corresponde y que todos los demás nos deben, desconsiderando su origen último. Y esto es un ejemplo más de las derivaciones que el sentido de los derechos ha provocado en una sociedad en la que nadie se siente deudora de nada, y todos nos sentimos acreedores de cuanto más mejor.
La caridad funcionaba mejor cuando era ejercida y practicada por los que voluntariamente – o guiados tal vez por el afán de ganarse el cielo, más encomiable y digno de respeto a mi juicio que el de ganarse escaños – elegían ser caritativos.
Ahora está reglamentado, tenemos que ser caritativos.
Algo que debería ser una virtud que adornase a la sociedad se convierte en una imposición y conlleva por tanto una pérdida de libertad y una dejación de la propia responsabilidad porque «que lo haga el estado que para eso está».
Que no pretendo yo asegurar que no tenga que ser así, pero se llega a que, por ley y por medio de impuestos, gentes que a lo mejor no van precisamente muy sobradas vean mermados sus haberes en beneficio de quienes no siempre está del todo claro que lo estén necesitando más que ellos.
Curioso punto de vista. Me despista usted. Al hablar de libertades individuales utiliza incorrectamente, o no, el modo condicional y al hablar del sentido de lo colectivo utiliza el hipotético.
Llevo más de veinte años trabajando con personas discapacitadas y jamás me han hecho sentir que “les deba algo”. Lo que sí le puedo asegurar con absoluta rotundidad es que no son privilegiados. Si vamos a hablar de privilegios tenemos otros colectivos en quién fijarnos para definir el término con mayor exactitud. Creo yo. De igual modo al hablar de “riqueza retrotraída” convendría no perder de vista una visión más amplia del paradigma socioeconómico en el que vivimos. A ver si va a resultar al final que las “clases extractivas” de las que tanto se habla señalan directamente a los beneficiarios de los servicios sociales.
Sí es cierto que las actitudes sociales hacia los más desfavorecidos han ido cambiando mucho a lo largo de la historia. Desde aquella ley de Licurgo en Esparta que permitía el despeñamiento de los más débiles desde el Monte Taigeto hasta los conceptos de normalización e inclusión que se barajan hoy hay un largo recorrido. Pero es la historia de imperios que los despeñaban, religiones que se compadecían de ellos relegándolos a la caridad, la pobreza, y la exclusión, y progreso científico que los categorizaba según su discapacidad y los aislaba en instituciones de asistencia.
Pero nos podemos remontar muchos, muchos miles de años atrás. Es asombroso constatar como nuestros antecesores más remotos ya enterraban a sus muertos y cuidaban de sus enfermos sin tanto concepto y teoría. Quizás a fuerza de cariño. También hallan restos que datan de asesinatos, canibalismo y todas esas cosas que al igual que hoy manifiestan lo peor de la naturaleza humana. Laicos todos ellos. Tantos años de evolución y qué poco hemos cambiado en algunas cosas.
Estimado Isi, el artículo habla de los desfavorecidos más que de los discapacitados -muchos de ellos ni siquiera tienen consciencia de esta categoría-, y más que apelar a ellos, lo que trata de hacer es concienciar a los que no lo son de que, pese a que serían usufructurarios de algunos privilegios, deberían plantearse si utilizarlos a tenor de que merma la capacidad de los que realmente lo necesitan.
En cualquier caso, siendo yo también profesional del ámbito que indica, sí me he encontrado muchas personas que consideran que «el mundo o la sociedad o los demás, les debe algo. Evidentemente más en actitudes y comportamientos que en el discurso.
Un saludo,
Es interesante la reflexion de Carlos. Tengo algunas dudas que quisiera enumerar. Repito son dudas.
Pongo, con perdon , mi caso. La empresas de Turismo han estado en crisis, por la proliferacion de webs internacionales, especie de multinacionales, etc. La ultima empresa donde estuve, a pesar que el 80% de los beneficios de mi departamento se debian a mi labor, prescindio de mis servicios, quizas de comun acuerdo. La baja de produccion era evidente. Yo decidi NO ir al Paro y SER AUTONOMO. Desde entonces, he sido mas libre humanamente pero ha sido muy dificil prosperar economicamente. El entorno de Poder es muy grande. Entiendo que no estamos para protecciones estatales, estamos para ser libres y autonomos. Pero, los que lo hacemos, en cierto sentido, vivimos la Utopia. Tenemos capacidad y recursos de educacion, de salud, de ambiente social para poder hacerlo.
Si los recortes que se preven son de educacion, salud, etc. Yo veo que puede ser un error. Creo que es un servicio mas al Sistema Economico que esta creando esta crisis de valores. Vemos a la juventud sin rumbo. Habra casos que soporten este ambiente. Regularmente familias pudientes y estable. Pero la crisis de oportunidades se esta limitando, todo lo contrario que lo que se necesita.
Estoy de acuerdo que somos «deudores», tenemos una tarea que cumplir pero, es evidente, hay un «colchon» de circunstancias adversas. Un EGO rampante en la gobernanza y una muy poca fiabilidad en los programas de accion social.
Son dudas, Carlos, mis dudas. Un abrazo
Ayer, en un medio provincial, venía el siguiente titular «El billete a Asturias que era de 49 euros ha pasado a 200 tras ser subvencionado». Luego proseguía hablando de Ryan Air.
Hace mucho que se ha demostrado empíricamente que las Subvenciones agravan y perpetúan los problemas que falsamente presumen de resolver.
Esto es así porque de los Problemas también se vive.
Estimado Sñ. Peiró. Puestos a puntualizar, puntualicemos. Discapacitados somos todos. Yo hacía referencia a aquellos que por uno u otro motivo son destinatarios de los servicios sociales. Personas que necesitan de apoyo para formar parte esta la sociedad de la manera más autónoma y activa posible. No se puede hablar de libertad individual a quien se encuentra con serios obstáculos para llevar una vida plena. No son usufructuarios de privilegios. Son personas vulnerables que a menudo se encuentran en riesgo de exclusión social.
Y sí. Se lo debemos. No se puede hablar de solidaridad y de “riqueza retrotraída” en el mismo texto. No se puede hablar del bien común y tratar de concienciar a la población de que ese gasto recae sobre los demás porque luego llega el Sñ. Bravo y confunde liberalismo económico con libertad. Esa evolución que dice que “es de agradecer” y que “le gusta” no es lineal. Ya sabe, a la evolución le gustan esas cosas. Da pasitos adelante y pasitos atrás. Y es de esperar, que ese sentido de lo común, de la comunidad, que somos todos, todos podamos desarrollarnos libremente, sin dejar a nadie atrás. Recortar o recortarnos en gasto social no nos va a hacer mejores, ni más listos, ni más competitivos, ni más ricos, ni más responsables. Más al contrario. Tal y como están las cosas debería aumentarse. Y espero que el próximo gobierno lo haga con sentido de la equidad y lo sepa gestionar con responsabilidad.
Isi:
No creo confundir Libertad con Doctrina. Lo que yo digo, casi especificamente,, que todos las capacidades y se me han dado las capacidades para tomar con Libertad, siempre relativa, una decision laboral
Creo que dejo, muy claro, que seria un error menguar las asignaciones a salud y economia.
Entiendo, hoy mas que nunca, que a veces se puede leer o inferior lo que que uno no tiene, ni las mininima intencion, de confundir
Es posible que, de algún modo, ante las palabras: ayuda, subsidio, subvención…nos sintamos vulnerables, y siempre encontremos un resquicio por donde nos veamos suceptibles de acceder al estado subsidariedad, aunque solo sea en algún momento de nuestra vida.
De alguna forma, también, es probable que esa tendencia tenga origen en la educación, en el propio funcionamiento de un sistema que necesita justificarse a sí mismo.
No en vano, encuentro que, la palabra «derecho», viene del participio de «dirigere»: conducir o guiar.
El secuestro semántico de una actitud libre de egoísmo, como es el deber de ayudar, integrar y sostener a los más vulnerables, es el que quizás, dé lugar a interpretaciones subjetivas que impiden, en un momento determinado, profundizar en el concepto real de lo que se está dirimiendo.
Renunciar a la «dirección adquirida», se vuelve muy difícil.
Quiero decir, se vuelve complicado de discernir cuándo, si es que es así, ya no necesitamos de esa ayuda, cuándo, son otros los que la necesitan más.
La educación y la inercia nos hacer muy cuesta arriba pensar en «derechos», no como algo coyuntural, no como algo que, si se consiguen, no sea solo para nosotros, sino que tengan un carácter universal, para todos, para los de aquí y los de allí y trabajado desde el altruísmo de otros, eso, ni siquiera, muchas veces, ni nos lo planteamos.
Puede que, como la mayoría de las inercias que parecen lastrar la evolución hacia un sistema más dinamizador y activo de los conceptos «aprendidos», suponen una importante rémora, mientras nos cueste tanto reconocerlos.
El «derecho adquirido», ¿puede ser «la dirección que me mantiene prendido»?…..la tarea de desaprender…es todo un camino, pero nunca me queda claro, cómo se puede empezar a abordar…..
Resulta que como la venta de alcohol está subvencionada por el Estado, con una copa de vodka quizás este artículo entre mejor.// Imagino que en la factura de adeudo se ha de incluir (restando), el maltrato y vejaciones que estas personas sufren por el hecho de ser discapacitadas o desfavorecidas, o..esto No Cuenta..claro¡! Habría que demostrarlo!!–así que Privilegios? Donde? // donde las oportunidades de una vida decente en una sociedad que Dilapida Dinerales en alcohol, obras sin acabar, tar-JETA-sblack etc..y «endeuda» a enfermos, desfavorecidos etc??//qué sociedad puede soportar que gente sin leer-escribir, sin oportunidades de casi nada, se les deje ahí..como sino «pasara nada»..// Mire usted Sr.Peiró sino salen unas cuentas se hacen otras, simple!!- y…mira como para consumo humano el AGUA te la venden a precio de oro, mientras para campos de golf de los Privilegiados de Turno se gasta sin miramientos a bajo precio..//Aquí pasa parecido, las Personas..en cualquier condición, edad, situación personal etc..deben Contar con unas básicas necesidades poco menos que «cubiertas» sí..Cubiertas..que los sectores Privilegiados estos mínimos lo tienen cubierto por Goleada y la LÚ…sí la LÚ todavía la cargan al presupuesto de la CAM..y no mencionó la Z que se la llevó Zapatero con su cambio constitucional!!// Un Saludo y Viva el Vino!! Que Diría el Revilla..
Existe demasiada sofisticación social que produce un gran vacío al mismo tiempo. La dignidad no exige nada, la verdadera. Seguro que esta sociedad se olvidó de personas que realmente lo necesitaban, la ayuda social me refiero. Recordemos a » Misericordia» y a Benina su personaje principal de Galdós…hasta entre los mendigos había clases y sus luchas…así en la vida en cualquier tiempo.
Al final ¿ por qué coincidirán Dickens, Duma, Galdós, Baroja, Beethoven y Mozart en lo mismo?, ¿ por qué llegaron a la misma conclusión todos?, ¿ que es lo más valioso en la vida?…eran grandes genios y no se equivocaban.
Esto tan bonito lo leí en un Twitter: » Jamás nos identificamos con el que sufre, sino con la lejana posibilidad de perder uno solo de nuestros privilegios». Muy certero, ¿ verdad ?
Esto de mi Emilín ( Emilio) Prados.
Canción
No es lo que está roto, no,
el agua que el vaso tiene:
lo que está roto es el vaso
y, el agua, al suelo se vierte.
No es lo que está roto, no
la luz que sujeta al día:
lo que está roto es el tiempo
y en la sombra se desliza.
No es lo que está roto, no
la sangre que te levanta:
lo que está roto es tu cuerpo
y en el sueño te derramas.
No es lo que está roto, no,
la caja del pensamiento:
lo que está roto es la idea
que la lleva a lo soberbio.
No es lo que está roto Dios,
ni el campo que Él ha creado:
lo que está roto es el hombre
que no ve a Dios en su campo».
Y Juan Ramón Jiménez también sabía mucho…esa claridad y luminosidad.
La Única Rosa. (JRJ)
Todas las rosas son la misma rosa,
amor, la única rosa.
Y todo queda contenido en ella,
breve imajen del mundo,
¡amor!, la única rosa.
Buen artículo del Autor. Saludos a todos.
Disculpen me faltaba algo.
https://www.youtube.com/watch?v=YZ87d_Wqm9Y
Quizas, deberemos partir de bases reales. Venimos de sociedades altaneramente desiguales. Y de guerras en las que se lucha por la subsistencia.
Venimos de sociedades en donde, incluso en España, en paises llamados desarrollados, hay semi-esclavos. Gente que trabaja sin descanso dominical, ni horas para llevar una vida plena familiar, ajenos a la vida cultural. Subsumidos en atavismos religiosos, consumistas, vacios de alegria. Personas humilladas, avergonzadas de su condicion. Una sociedad con graves enfermedades psiquicas, con adicciones permisivas. Alcoholismo, cocaina, etc.
Sociedades que han creado «monstruos», asesinos, violadores, etc. Distracciones malsanas, etc. Y, entonces, si se quitan los subsidios del minimo vital, con toda seguridad se acrecentara el problema. Es una realidad sociologica. Mas alla, de la «estupida» politica, mas alla de la «estupida» economia. Hay un problema Humano. En esto estoy, totalmente, de acuerdo con aquellos que reinvindican un cambio radical en la manera de gobernar. Este Sistema asfixia, discrimina, «suicida» a los seres humanos. Este Sistema envilece la condicion humana. Es en esto en lo que debemos profundizar.
Hola, Sr. Manu Oquendo, le saludo y le contesto a su comentario aunque para nada hay aludido a nadie en él.
Le contaré algo que estoy segura que a nadie le interesa incluído esos que dicen velar por nuestros derechos, y por lo tanto el derecho a la vida también.
En la vida llevada, tan alegremente que yo la quería con mis estudios, entre ellos los universitarios..oh!!-tropezón..tienes un familiar muy cercano, con el que tienes lazos afectivos y, con «intentos de suicidio»,pues bien, aquí la «tontita» de turno..se hace cargo de tal asunto..y «atiende» tal situación cómo puede, cómo le es posible etc..y, cómo de acero no soy, la cosa me pasa su «factura» y..abandono, los estudios, pasando a labores profesionales etc.
Va pasando la vida, y,,vaya, otro familiar también muy cercano que estuvo ya muy enfermo/a de siempre, empeora y apenas se mueve de una cama, (con Discapacidad psíquica añadida), hombre cómo no!, impulsiva que es una y poco pensante para algunas cosas, le dedico a este familiar unos 12 años mínimo, de «atenciones»;
error por mi parte?- quizás!!!-
que también debía haber hecho algo más porque esta sociedad me lo pide?-(no dejar laboral etc)..quizás!!- En Realidad lo que quiero decirle es que DE los problemas, yo creo nadie vive, y nadie los quiere..creo; por desgracia si te tocan de cerca te los tienes que tragar aún a costa de no saber hacer-lo del todo bién,( ya que esta sociedad exige en exceso a quién muy mal ya está);
Y..subenciones a quién?- sí a quién..aquí resulta que los malos de la película no vamos a ser los ciudadanos de a pie o en moto..qué ya vale eh?–que vamos haciendo cómo vamos pudiendo y apenas con muy poco..qué ya vale eh?..
subenciones a quién?-..cómo va el Rouco en su ático de 200metros cuadrados y sus monjitas que se lo dejan cómo la patena?..
y..cómo es que una niña de 9 años cobra de España 109.000euros por..»la gracia de dios»?..
y cómo es que la Iglesia se lleva 14-15millde euros, cada año..aparte de las pensiones de los mayores a que los asiste..porque para una sopa con 4fideos flotando..de vez en cuando, de cena, tampoco..hace falta tanto eh?…
subenciones a quién?…eh??-
Hola, Mary.
Tiene usted mucha razón además de un alma caritativa que la ennoblece al tiempo que la convierte en víctima propiciatoria de por vida.
El tema en cuestión no es sencillo ni se aviene a reglas rígidas. Por ello líbreme el Señor de dar recetas más allá de lo que hoy día es una evidencia científica: Las subvenciones rara vez resuelven los problemas sino que los agravan.
Parte de estas investigaciones se han llevado a cabo con la población afroamericana, la colectividad étnica más subvencionada y apoyada del mundo, sin que este hecho haya conseguido evitar su marginación económica creciente.
Ahora nos sucede con los Coches: Si queremos un modelo para Montarlo aquí……….subvención que te crió. VW ya está pidiendo más para quedarse otro poco y se lo estamos dando.
En España ya debemos de andar por un 25% de «pobres» (¿?) y millones de «Dependientes».
El número de personas de capacidad reducida que tienen derecho a ayuda pagada obligatoriamente por quienes no lo son no deja de crecer hasta el punto de que —incluso antes de que comiencen a venir refugiados a razón de mil y pico euros al mes más vivienda social, colegios y sanidad– nos ha llevado a una situación en la cual la mayoría de la Población……………….es dependiente del Estado. Es decir de otras personas.
Tenga por seguro que esto seguirá creciendo porque ya hay Partidos que prometen salvar la «Brecha del Gigabyte», la del Ipad y la del WiFi.
Una de mis abuelas decía muchas cosas pero frecuentemente terminaba con dos Frases Tremendas.
1. «Así se murió uno» (De no hacer nada).
2. «No hagas favores porque no te los perdonarán» (Esta se explica sola)
Bromas aparte:
¿Dónde está el límite?
¿Cómo conseguir atender estrictamente a quien lo necesita sin que se llene el territorio de Gorrones? (Free-Rider en inglés, donde todo suena más fino)
Santo Tomas Moro lo resolvía no subvencionando nunca antes de que el subvencionado, en la medida de su capacidad, trabajase gratis para la comunidad.
La Utopía, de Moro, es muy interesante porque estos asuntos no son nuevos.
Saludos cordiales.
Felicidades Carlos, porque aunque no me da – el cronos- ( risas) para leer los comentarios, esta vez tienes muchos. Y me alegro.
Hablas de víctimas y caridad y cariño. Rozas en llagas.
Entiendo el mensaje que has escrito. Perfectamente.
Los voluntarios que alguna vez hemos participado con nuestras horas en algo, lo que sea, por convicción, sabemos lo que dices.
Hay de todo en la viña del señor. En una red de solidaridad popular RSP la gente va a comer, pero es otra historia si les dices que se pongan a fregar o a formar parte activa…
En un deshaucio, no por mi propia experiencia, sino por la de amigos que acompañan, la queja es siempre la misma y es constante, que los deshauciados no están para acompañar a los siguientes.. etc.
En las bajas, o en las minusvalías, en los puntos de las oposiciones, pues a veces, tienen ventajas, sí, ventajas que no son lo objetivas que deberían ser.
Y hay ventajas de género, lo que alguna vez en el futuro les parecerá increíble, y por los dos lados..
Y como esto ya lo hemos hablado…..
No veo ofensa alguna en lo que escribes. Tampoco que las religiones sean mejores o peores en caridad que las instituciones públicas. Pero es obvio que los que han hecho voto de pobreza o viven de otra forma, ( bien con menos) o están acostumbrados a tratar con la miseria, con las minorías étnicas etc.. los que de verdad hacen frente con su trabajo diario, a situaciones conflictivas, saben manejar recursos, movilizar a la gente, desvictimizar y agradecer, sobretodo agradecer la experiencia que supone escuchar risas y cantos en medio de situaciones críticas en la que cualquiera de los que parecemos completos, ( pero cojos todos..) nos moriríamos del susto.
Y sí, también quiero un mundo en el que no haya ni víctimas ni gente que haga las cosas – sobretodo las que se hacen conscientes y por voluntad- esperando que luego se les page.
Pero así es como se pretende atar el mundo, atan los unos y los otros, Lo que me preocupa es que se aten los futuros, y por eso los sabios se preguntan :» ¿Por qué es necesario poner alas a los ángeles para justificar el vuelo» precioso, no?
Un abrazo
Réplica a Manuel Oquendo:
Ciertas acciones no se hacen por caridad,sino por un sentir Moral de que «Es lo que Hay que hacer», se ayuda «desinteresadamente» y..porque así lo decidió en aquel tiempo una;
Sin etiquetas de «víctima propiciatoria» por favor, que aunque algo «ingenua» de la vida se aprende…Si Dar o No y a quién. ..y..por supuesto, si se tiene y si se «quiere»;
Es verdad que las «subvenciones» agravan los «problemas»..
Unos buenos recortes donde debe ser y más derechos para las personas, incluido el Laboral- sin Abusos y con más Justicia y la situación de España y españoles, seguro mejora!!
Que hay un 25% de pobres y en aumento y muchos dependientes..
por lo segundo, se van muriendo..así que..uff…menos dinero?-
Venga va!!- que entre los 40.000 mill De € a la Banca estafa, y los montantes a la Realeza, Clero etc..lo destinado a «social» es una «miaja»..que decía mi abuela también.
Y dale con lo de la «vaguería»..y quienes somos para opinar o juzgar al otr@s?- en base a qué valores?, en base a qué molde?, y quién establece ese molde?..
Qué sabe uno/a de la vida de otr@s?..
Está muy claro, son temas complejos..pero que con más Justicia y menos Caridad igual algo se apaña la cosa..que decía mi abuela también;
Un saludo Sr Oquendo..le suelo leer y le considero un «cerebrito»..pero en algunas cosas ya lo apuntaron por ahí.. (juega usted en otra liga).
Se ha pretendido exponer la importancia que tiene que una sociedad dedique recursos importantes a los más desfavorecidos, y que la misma altura de miras que supone el hacerlo, debería corroborarse tanto por quienes lo necesitan como por los que no.
En relación con el tema parece quedar claro que hay diferentes puntos de vista. Unos recalcan la importancia de que se lleven a cabo esa política social, haciendo hincapié en favorecer a los desfavorecidos, y otros en que las actuaciones palíen la situación desfavorable. Pero que quede claro que nadie ha hablado de recortes, sino de buen uso.
Cuando F,Lorca decía que él no le daría un bocadillo a un necesitado, sino que le daría solo medio y además un libro, representa bien un punto de vista en el que en vez de evitar las consecuencias, evitando las consecuencias de una «discapacidad», lo que cree es que se debe poner también el acento en favorecer la capacitación.
Como algunos os habéis preguntado, yo también tengo dudas de que las relaciones de dependencia que genera el tono general de las intervenciones, en vez de ayudar a las personas a salir de situaciones lamentables y dramáticas, lo que estén creando sean la estatificación del problema.
Gracias a todos por el debate.
Hola, Carlos, buenos días.
La Caridad es una forma de Amor, de las más elevadas junto al «Agape».
«Caritas» es Amor con mayúscula en su significado etimológico a pesar de que hoy se ha procurado desprestigiarla por aquella gente que vive como Intermediario en el proceso Redistributivo Obligatorio en el cual se ha ubicado el Poder.
El asunto que planteas es, a mi modo de ver, uno de los dos o tres conceptualmente más importantes y que explica por si solo la Crisis Estructural de los Sistemas de Democracias Representativas en los cuales vivimos y que hoy día hacen agua por todas partes.
3.5 sobre 10 es la nota que nuestro sistema político recibe de la Ciudadanía en 28 países Europeos (Eurostat). Grave, grave, grave. Tanta gente no se equivoca.
¿Por qué hacen agua?
Pues financieramente porque, dado que el Voto se Compra Redistribuyendo sin la exigencia de Responsabilidad…………….no hay límite posible y gran parte del Juego Político se centra en:
1. Encontrar continuamente Segmentos de Voto Comprable.
2. Buscar quien lo pague a la fuerza o los mecanismos de Endeudamiento que lo Permitan.
Este coste fiscal incremental ha llevado la fiscalidad total, en menos de 80 años, desde casi insignificante en tiempos de Keynes a más del 60% de un Salario Bruto de 26,000 euros año. La media que resulta en un Neto Mileurista después de todos los impuestos.
Esto produce una situación que se denomina falsamente de «Justicia Distributiva» y que se hace Obligatoria que por serlo, deja de ser Justa y se convierte en un Cáncer estructural.
El sistema hace mucho que es incapaz de Definir Justicia (sin Adjetivos) y ha pasado a esconderse tras los adjetivos que todo deforman.
Cuando el énfasis pasa al adjetivo………….mala cosa.
En Otras Palabras si para Dar a Uno hay que Quitar a Otro y esto se hace con Coacción no se puede decir que al segundo se le trata con Justicia.
En absoluto: se le está privando de algo que es suyo. Esto sucede ya con los propios mileuristas.
Pareto lo definió perfectamente con su criterio de Eficiencia social. «Un sistema excede su límite de eficiencia cuando el Beneficio de uno de sus miembros se hace a costa del Perjuicio de Otro miembro». Nosotros lo hemos superado hace ya mucho tiempo.
Naturalmente este esquema no es contemplado por la Social-Democracia imperante.
Y por ello se ha comenzado a morir el sistema.
La solidaridad, creo, es una obligación moral.
Y precisamente por ello…. o es voluntaria o no es solidaridad.
Saludos y enhorabuena por el artículo.
Yo creo, con todos mis respetos, que este comentario, Manu, de alguna manera, introduce una interpretacion que escora la realidad.
No se, si cuando hablas de un salario bruto, hablas de un salario mensual o un salario anual. Si es mensual, es algo dificil que un gran numero de personas tenga ese salario y los que lo tienen, en este sistema hay muchas maneras legales para evitar la imposicion «radical». Entrariamos en una discusion tributaria compleja que nos llevaria a otro foro. De cual forma, este asalariado, si es mensual, seria once mil eurista.
Podemos estar de acuerdo que la «imposicion», asi tambien se llama la fiscal, produce rebeldia y el ego de los seres humanos es muy rebelde. Por eso yo aduje, en uno de los comentarios, que hay que volver a las «viejas ideologias», para volver a considerar al ser humano. Volver a interpretar la fuente, el hombre y la fenomenologia.
En fin todo esto nos lleva a ese amplio debate que esta web de «Otras Politicas», ha puesto sobre el tapete, como la proliferacion de leyes, etc,
Un saludo
Hola, José Mª.
Te lo aclaro con mucho gusto.
http://www.civismo.org/es/investigaciones/calculadora-de-impuestos
En esta web se puede calcular.
Acabo de hacerlo para el sueldo bruto promedio (anual) de España. 26,000 euros. Soltero, sin hijos, con casa propia, un coche y una moto pequeña, vive en Cataluña.
Gasta en combustible para ir a trabajar y otros desplazamientos 300 euros mes, en gasóleo de calefacción y agua caliente 120 al mes.
Fuma cinco cajetillas por semana, bebe poco, una caña cada día laborable para comer y dos copas cada fin de semana.
No ahorra nada porque se gasta todo lo que gana.
La Web da estos Resultados.
Cita
En total trabajas 210 días para mantener el Estado, hasta el 29 de julio.
Tu sueldo neto mensual es de 1.694,31 €.
Si sumas lo que la empresa cotiza a la Seguridad Social por ti, tu sueldo o coste para la empresa es de 33.774,00 €.
De éste importe, pagas a la Administración:
Seguridad Social: 9.425,00
-Retención en la nómina: 1.651,00
-A cargo de la empresa: 7.774,00
Impuestos: 10.012,91
–Impuesto sobre la Renta 4.017,32
–IVA 2.641,33
–Impuestos Especiales 2.606,99
–Otros impuestos 747,27
Total Impuestos: 19.437,91
Desde 2010, con las últimas subidas/bajadas de impuestos trabajas 7 días más para el Estado, lo que supone 628 € más.
Fin de cita
Este señor «promedio» paga de Impuestos el 59.4% de sus Ingresos totales (incluyendo S. Social pagada por la empresa para su pensión)
La gente realmente no se da cuenta de la Fiscalidad real pero no solo es brutal sino que siempre es INSUFICIENTE para lo que el sistema puede gastarse comprando votos.
Un saludo cordial
Estimado Manu:
Entiendo el resultado de la operacion y me parece cargado de razon. Es evidente ese ahogo del trabajador medio. Esa carga fiscal, ciertamente, es insoportable.
Esto lleva a una reflexion sobre una reforma tributaria. Hay asuntos dificiles de comprender como la tributacion de las grandes empresas, de las multinacionales.
Hay un articulo en el Diario El Mundo de España, fechado el 23/03/2012 que titula » Las trampas de las grandes empresas para tributar menos que un mileurista»
Manu, de nuevo muchas gracias por la aclaracion
Debo decirles que he estado muy atento a todo lo que aquí se ha escrito y que el Sr. Peiró ha expuesto un tema profundamente difícil y podríamos decir que clave.
Estoy de acuerdo con el Sr. Oquendo en que aquí está uno de los conceptos más importantes que podemos encontrar si no el que más.
He ido escribiendo algunas cosas a la par que ustedes. Muchos caminos no me han llevado a un final pues el tema es tan intrincado que resulta difícil encontrar el extremo y final sin perderse por el camino o divagar tanto que la ruta a su mitad o comienzo parezca equivocada.
Aún así creo que he podido pulir más o menos un texto y mis ideas con un principio y un fin pero que no publicaré aquí para no reincidir de nuevo en una larga exposición.
Sólo intentaré dejar para ustedes una pequeña idea o reflexión, aún siendo tardía, con el ánimo de hacernos recapacitar a todos más si cabe sobre éste tema.
Existe un profundo desequilibrio entre lo que damos y tomamos.
Tiene mucha razón el Sr. Peiró cuando dice que estamos en «una sociedad en la que nadie se siente deudora de nada, y todos nos sentimos acreedores de cuanto más mejor».
Digo que existe un profundo desequilibrio entre lo que damos y tomamos y la naturaleza nos obliga y a la vez nos enseña sobre ello.
Por naturaleza tomamos lo bueno y dejamos nuestros desechos. Nuestra naturaleza nos hace tomar lo bueno y dejar lo malo y ella, el conjunto de toda ella, enseñándonos Caridad, trasforma nuestros desechos para darnos de nuevo lo bueno y permitir así la vida.
Ojalá aprendiéramos, supiéramos y enseñáramos a trasformar el mal en bien al igual que hace la naturaleza para nosotros.
Un saludo a todos.
Desde la Ilustración han pasado muchas cosas pero el modelo que hoy tenemos en las sociedades Occidentales es fruto de la Victoria Práctica de la Ideología Socialista sobre la Liberal.
Sobre ésta última se construyó el gran impulso Occidental del XIX y principios del XX y desde la crisis del año 1929, –resuelta aparentemente con la Segunda Guerra mundial–, se va imponiendo la ideología Socialista que impera tanto en la Izquierda como en la Derecha.
Es lo que llamamos Estado de Bienestar. La mecánica de la Compra del Voto resulta inexorablemente en su crecimiento con cualquier tipo de gobierno representativo sin que existan límites plausibles.
Por otra parte hoy no tenemos debate de ideas porque ha sido sustituido por un «discurso» entre emocional y sensiblero (el buen rollito) y con un sistema educativo del que paulatinamente se van eliminando elementos culturales importantísimos anulando todo soporte racional del también inexistente sistema de creencias.
En otras palabras, se lleva a las masas a una mentalidad de Kindergarten, se fomenta desde el Sistema mediático y educativo la emotividad a costa de la racionalidad y hacerse preguntas incómodas resulta «antisocial».
Esto realmente ya solo lo hace gente que no ha pasado por el esquema de Socialización Obligatoria.
El mundo Académico en las Ciencias Sociales nunca ha estado más sometido y autocensurado.
Sin embargo, por difícil que sea, el debate y las ideas resultan imprescindibles porque el camino que hemos seguido nos han traído al punto decadente y terminal en el cual, como sociedad residuo cultural de otros tiempos, nos encontramos.
En este contexto es como he interpretado el artículo de Carlos que tan oportuno y provocador me ha parecido.
Un saludo
Estimado Manu:
Perdona que te sirva de contrapunto en este interesante debate.
Es que esto no es ideologia Socialista, ni es nada, se llama Consumismo. Y, hablando de Cultura, que como todos sabemos se grava al 21% y las «copas», en cualquier garito, azul o rojo, el 10%.
Te voy a contar una anecdota, sobre los artistas. En los paises «socialistas da gusto estas cuestiones. Suelo ir a un pequeño situado Teatro, que te recomiendo mucho, en la calle Sancho Davila, por el Metro Ventas, la Sala Tribueñe, que dirige una maravillosa Directora rusa, Irina Kouberskaya. Alli conoci a una famosa cantante, de esa nacionalidad, Olga Arefieva. Ella acudio alli en patinete.
Te puedes imaginar al «tonton» de Justin Bieber sin estar rodeado de guardespaldas, choferes, maquilladores, etc. Si alguna vez has pasado por el Palacio de Deportes, cuando actua alguno de estos idolos del «audacity, que a «pelo» suenan como gargantas «profundas»
Este es el mundo globalizado en que vivimos. El mundo del Consumismo y del Esclavismo. Desde los niños de la India hasta nuestros niños de ortografia «KAOTIQUA»
Se hace demasiado énfasis en lo económico más que en las circunstancias en las que las «personas» se encuentran;
Aclaro aquí no haré más comentarios, cada cual su postura, pero no es lo mismo Ver los Toros desde la barrera que Lidiar con ellos, siempre se dijo.
No debería haber tanta carga impositiva para lo que denominan clase «trabajadora» y, un ejemplo: este Impuesto, IVA: al cuanto asciende su recaudó? – en que se distribuye o gasta?- para qué sirve?- alguien lo sabe?-
Por otro lado, hay bienes Naturales: tierra, agua, aire, alimentos..que la Naturaleza nos DA al todos por Igual: al Qué tanta especulación con ello?-
La labor de la iglesia, la ideológica no la comparto, la Social y de Atención es en general buena, creo que sí.
Desde el siglo XIX, revIndustrial-movimientos sociales y la brutalidad del siglo X X…todo va cambiando mucho: la tecnología está y sustituirá miles de empleo…qué pasará entonces?- más bolsas de pobreza?-..
Algo habrá Qué hacer?- no?-..
Esto no es lucha Capitalismo- Socialismo como nos lo hicieron creer..
yo creo que No..como dice J. M.Bravo, revisar el Concepto de hombre personas..etc..qué somos: sólo seres productores/consumidores? Y ahí se acaba todo?-..
La Sociedad va al dar un Enorme Salto por pura necesidad evolutiva de las Personas e irá acompañado de otra forma de Considerar lo Económico, el siglo XX ha sido involutivo a nivel humano..
y..si ponemos «bondad»..todo irá para donde debe ir//esto es mi pensar y nada más.
Tema complejo donde lo haya..Estos te Carlos, lo «clava» en sus artículos siempre interesantes. Adeu. «
Perdón erratas.
No puedo revisar texto. Gracias.
Leo en una noticia de El Pais, la inquietud que empieza a suscitarse en Universidades del Reino Unido y en las de EEUU, ante el aumento de episodios de «intolerancia emocional»,de la que se empiezan a dar muestras entre los universitarios.
Parece que, a pesar de su preparación, y de su juventud, muestran una incapacidad creciente a toca «ciertos temas», independientemente de la carga ideológica con que se traten.
Así se exigen la no participación en una conferencia de una conocida y anciana «feminista», (por lo tanto tampoco se podría haber dado un debate), o se insulta a un profesor de forma grosera por pedir que no haga caso o se aplauda un disfraz sobre Hallowen «ofensivo»…(cosa bastante frecuente el que esta fiesta dé lugar a situaciones de dudosísimo gusto, pero todo es susceptible de confrontación).
Son dos hechos distintos, parece, si les queremos etiquetar ideológicamente. Pero la noticia, y creo que puede ser así, hace hincapié en la incapacidad de la gente que va a estar más preparada en esta sociedad , para el debate, para profundizar más allá de lo políticamente establecido, sin entrar si es en realidad es correcto, no lo es, o simplemente el término se queda corto.
Eso, enlaza, creo, directamente con tu comentario, Manu.
Esta sociedad del Bienestar, de guardería….nos está convirtiendo, no solo intolerables al aprendizaje…que requiere de fracasos, sino que además, desde la educación, está imposibilitando el acceso a la «madurez», personal y «social», haciéndonos caer en el error, de pensar que esa madurez la da la aceptación, sin más, de que lo que tenemos es el mejor de los estados posibles, de no profundizar más allá, en busca de dónde viene todo (tabú),…y que evolucionar y progresar es, en todo caso, salir a la calle a «luchar» por esa «querencia a ser dirigidos», que en definitiva suponen los «derechos adquiridos».
Una sociedad de «niños eternos».
Ya que algunos estamos ávidos de debate e ideas yo voy a exponer unas cuantas que van desde no sé sabe dónde hasta no se sabe qué pero seguro que sirven al menos para llenar un buen tramo de página. Con su permiso.
Quizás tenga usted razón Sr. Oquendo, vivimos encapsulados en una forma de vida que parece estabilizada en su contención, pero que es un embalse aún así lleno de grietas que supuran.
Se nos contiene de forma consciente e inconsciente por parte del poder y los medios dándonos pan y circo. Pero poco. Lo justo.
Se nos contiene y se nos gobierna con guante de acero. Se nos dan esperanzas en base a la ciencia a modo de avance y conquista social pero a duras penas esos avances revierten en la totalidad del pueblo. Apenas en unos pocos elegidos a modo de ejemplo a los que se les publicita a bombo y platillo.
La educación se manipula, y se tergiversa la historia en muchos casos con ánimo, entre otros, de que no todos o solo unos pocos puedan alcanzar saber para así poder dirigir. Los elegidos son a menudo gente sin contemplaciones.
Todo eso ocurre.
Pero no todos o todo es así. El orden de lo bueno, aquello que todo el mundo sabe que es bueno, hace que inevitablemente la escala de valores que nos alimenta sea, aún con todos sus defectos, la apropiada.
La naturaleza de la física del entero Universo establece el equilibrio por encima de toda voluntad humana.
No existe sociedad, ni cultura que soporte el peso del avance del tiempo si además esa sociedad o cultura actúa contra natura.
Muchos creen que estamos aquí para nada. Por un simple y caprichoso proceder de la energía. Desde estamentos científicos, sociales y gubernamentales se nos educa, entre otras cosas, en tal concepto. Somos solo un capricho del destino y la evolución natural de una roca danzante en el Universo. No debemos ser los únicos se nos dice a menudo.
El tamaño y la cantidad de estrellas que pueblan el espacio debe ser suficiente como para que en otro lugar de él se hayan repetido las condiciones que se han dado aquí.
Pero a poco que pensemos un rato en todo esto y barajemos algunos datos, nos damos cuenta de que las variables son tantas como el número de estrellas y planetas, estableciendo así una carrera de probabilidades de tamaño astronómico.
¿Qué sentido tiene el ser conscientes o no, o ser conocedor o no de la existencia de vida semejante a la nuestra en cualquier parte del Universo si somos incapaces de ponernos de acuerdo entre nosotros, de ayudarnos aquí?
Si aquí, entre nosotros, siendo parte de lo mismo, nos vemos diferentes y extraños y ajenos.
No hemos aprendido a vernos en el mirar del otro. No hemos todavía aprendido a vernos en sus ojos y con sus ojos, ¿Cómo vamos a ver y a entender al que no es de aquí aún siendo también del Universo?
¿Qué sentido tiene saber que allí existe alguien semejante a mí si soy incapaz de verme en mi vecino de aquí?
Durante la Historia, nuestra Historia, hemos oído y aprendido frases de todos los tipos. Algunas frases son verdades como templos y se proyectan desde el principio de la razón hasta el día de hoy y aún así las olvidamos o banalizamos. Las obviamos o evitamos. Pero ninguna de ellas pierde su valor.
Las ideas no pierden su valor si la verdad les acompaña.
Fuimos a conquistar nuevas tierras y nos llevamos la gran sorpresa al saber que allí había alguien semejante a los de aquí. ¿Y qué hicimos?
Los unos y los otros nos vimos como extraños y diferentes aún siendo lo mismo.
Todavía no nos hemos dado cuenta que aquellos eran nuestros hermanos, a los que perdimos hace mucho pues todos nos esparcimos y desdoblamos al igual que ha hecho la tierra que pisamos.
Allí se fueron unos, allí quedaron otros.
Todavía andamos en esas. En saber ver al otro como propio.
No nos lo enseñan. Y si lo hacen, parece como si fuera algún tipo de engaño.
¿Yo soy como ese? – decimos en nuestros adentros.
Luego, esos mismos científicos y la vida te enseñan que sí, que eso es así. Que somos como el otro. Que nacemos vivimos y morimos al igual que el otro.
Pero no queremos creerlo. El tiempo y las diferencias individuales nos hacen creer a cada uno de nosotros ser especial entre todos. Tener derecho a más pues el yo predomina ante el tú.
No hemos aprendido ni nos enseñan como debería ser que la felicidad la obtenemos en relación al otro.
La satisfacción la recibo pensando e interactuando con otro.
El amor surge hacia otro.
¿Qué es el yo en soledad? ¿Acaso existe el yo en soledad? ¿Acaso no todos sabemos que procedemos de algo? ¿De alguien?
¿Acaso incluso en soledad no somos conscientes del otro?
Claro que debemos ser solidarios. De hecho lo somos porque somos seres llamados humanos. Porque simplemente vivimos somos solidarios.
Como parte viva somos solidarios.
De hecho creo que no conseguiremos el bienestar común hasta que seamos del todo solidarios.
Todo ser consciente, y nosotros lo somos, es consciente del otro. Si el placer se produce al amar al otro, al contrario, fíjense bien, ¿Cómo no vamos a ser conscientes de la necesidad de ser solidario hacia el otro, hacia el contrario?
Es verdad que somos débiles y que la condición humana nos hace fallar y dejarnos llevar. Como el agua. Aún así nuestra estructura es sólida.
Nuestra estructura soporta nuestras debilidades.
El tiempo nos limita. No todos somos el hombre más rápido del mundo, pero incluso él no será el hombre más rápido del mundo todo su tiempo.
Él también necesitará un día sentarse y descansar. Como todos.
Él también nació sin saber andar. Él solo lo será por un tiempo.
¿Cómo no aprovechar ese tiempo?
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Por otro lado, no puedo dejar de pensar en el ladrillo. En el ladrillo y todo lo que él significa.
En el construir y el hacer. ¿Cómo es que seguimos construyendo como principiantes? Construimos tiendas de campaña con ladrillos. Así vivimos.
Construimos bloques y bloques de viviendas cuadradas y me atrevería que a decir inhumanas. Seguimos ampliando nuestras ciudades en base a proyectos inviables.
Todavía no nos damos cuenta de cómo parece funcionar el balance armónico de las cosas. Hace poco leía que vamos hacia ciudades de 80 millones de habitantes.
Esas ciudades, estas ciudades, crean cúmulos urbanos en cuyas vías parece haberse instalado el colesterol al igual que en muchos de nuestros cuerpos. Se producen así aglomeraciones y atascos continuos generando inmensas bolsas de polución. Lo oímos todos los días y cada vez de forma más continuada. Parece que esto incide en el clima.
Claro que incide en el clima. El clima actúa de forma compensatoria generando torrentes en forma de lluvia interactuando de forma armónica con lo que nosotros le damos.
Sabemos que las nubes y las corrientes de aire crean frentes tormentosos cuando se deslizan por las laderas de las montañas. ¿Cómo no van a generarse de igual modo bolsas térmicas estabilizadoras en los cielos cuando las corrientes pasan sobre las ciudades? De igual modo me temo que descargan con furia su contenido cuando repletas e inducidas por los grandes cúmulos urbanos necesitan descargar su contenido. La pompa de jabón deja de ser estable y se desestabiliza en su superficie, se puntea hasta llegar a estallar. Espero que eso no ocurra con nuestra atmósfera y sepamos verlo y ponerle remedio.
Pero éste es sólo un punto de lo que supone el ladrillo.
El ladrillo es símbolo de bienestar y cobijo. En todos sus aspectos el ladrillo se ha instalado en nuestra mente, desde un cuento con tres cerditos hasta el dar trabajo a mucha gente pasando por el bienestar y el afán de mejora al que induce.
El ladrillo está clavado en nuestro ser en forma de gigantesca pirámide imposible de concebir y hacer.
El ladrillo es nuestra casa y ella está creada sobre un ladrillo redondo. Miren ustedes.
Pero no quiero desvanecerme demasiado en otros pensamientos y quiero volver dentro de lo posible al tema que aquí se trata. El cariño y la caridad.
Uno de los problemas es el cómo dar a todas las personas que necesitan y cómo eso puede revertir en la sociedad finalmente.
Si nuestro modo de actuar es pensar en el yo, me temo que nunca conseguiremos alcanzar satisfacción plena.
Las sociedades se estructuran actualmente en un querer conseguir lo mejor para mí al precio que sea y sin tener en cuenta a menudo en los demás y eso no genera bienestar ni mucho menos si no codicia y envidia. El hombre más rápido del mundo corre para que le vean. Corre para llegar el primero y ser el mejor. Corre para su cifra revierta en la global satisfacción de que uno entre nosotros es capaz de realizar eso. Es así que permitimos y valoramos y encumbramos a personajes que tienen más de lo que jamás podrán llegar a necesitar y aún así seguimos alimentándolos.
Tienen el mejor sofá que el resto de la población puede crear y seguimos dándoles sofás para que se siga sentando en el mejor y más cómodo sofá sin darnos cuenta que sólo tiene un culo para sentarse. Otros viven de pié o en el suelo mientras todos aquellos sofás van degradándose y enmoheciéndose por el paso del tiempo pues una sola persona no puede sentarse en todos ellos a la vez. Es realmente curioso.
Esta forma de actuar nos hace ser, a todos los demás que lo vemos, simples observantes de la aparente felicidad de una persona que en realidad nunca en su vida ha construido un solo sofá. Fíjense en la paradoja. El sofá se construye a raíz una serie de ovejas cuidadas por un pastor que vive perdido no se sabe dónde en condiciones quizás infrahumanas pero que tiene la constante voluntad al más puro estilo de cuento bucólico de mover a su rebaño cada día por las cumbres de montañas en busca del mejor pasto para generar la mejor lana. El sofá lo construyen tapiceros con sus manos enllagadas o de uñas largas y sucias que si las arrastraran por encima del cristal de una ventana podría hacer saltar los dientes del propio destinatario del sofá. El sofá se construye con madera cortada en los bosques por personas que quizás viven en el límite de lo correcto y legal pues talan árboles únicos que han vivido cientos de años.
Y allí se pudre el sofá. Finalmente sin nadie que se siente en él.
¿Por qué hablo de todo esto? Con el ánimo de hacernos recapacitar algo más sobre el origen y destino de las cosas.
¿Por qué no creamos para todos? Por qué no creamos para nosotros pues somos todos nosotros.
Los que pueden y los que no pueden.
Recientemente nuestras sociedades, estas en las que tan aparentemente confortables nos sentimos, se han visto en la tesitura de acoger a cientos de miles de personas que huyen de zonas en guerra, insisto, de las que obtenemos energía para sustentar éste nuestro supuesto estado de bienestar. Y ¿Qué hemos hecho? ¿Que hacemos?
Rápidamente nuestras temerosas sociedades se han dispuesto a negarles asilo, cobijo, alimento y vagan por los campos como parias. Al igual que nosotros cuando buscamos que se nos atienda y se nos dé algo de humanidad cuando tenemos un problema. De ventanilla en ventanilla.
Deme dinero decimos. A ver si así me puedo comprar un sofá o cientos o miles y me puedo olvidar de todos ustedes.
Tan huraños nos hace ser el mundo que hacemos.
Rápidamente nuestras sociedades gritaban, – ¿Cómo vamos a darles cobijo si los que aquí viven duermen en la calle? Primero son los de aquí.
Y los sofás siguen allí pudriéndose y enmoheciéndose por doquier.
Recientemente también he podido leer que existe una reunión o convención de implicados en la construcción de las ciudades del futuro. Ciudades viables y sostenibles. Ciudades que seguramente construirán personas que jamás consigan llegar a vivir en ellas. Algo así como lo que parece que ocurre en Dubai.
Finalmente vemos y somos conscientes de que el bienestar que genera en realidad la totalidad de los seres humanos no revierte en ellos.
Lo hacemos para otros y el pago es mínimo por ello. Apenas les da a muchos para subsistir.
El cariño y la caridad ciega hacen su trabajo. Pero también tendrán su justo pago creo. Todos ellos. Todos nosotros. Tan ciegos somos.
Parece que algo quiso que las palmas de nuestros manos y las plantas de nuestros pies tuvieran un tono claro. Según la rae: Claro, ra. Del latín clarus. Bañado de luz. Que se distingue bien. Limpio, puro, desembarazado. Y sigue…
Todos hacemos cosas por los demás sin saberlo y sin apenas darnos cuenta de ello.
Deberíamos hacerlo sabiéndolo y siendo conscientes de ello.
Deberíamos construir para nosotros pues es lo que hacemos. Deberíamos plantar árboles y crear zonas propicias para la vida como sólo nosotros sabemos hacerlo. Deberíamos comenzar a pensar en rehacer y en rehabilitar aquellas zonas olvidadas en las que vivimos hace tiempo y olvidamos. Al igual que hemos hecho con los hermanos que se fueron y encontramos.
Deberíamos construir y trabajar, ¿Cómo que no hay trabajo? Hay tanto trabajo que agota el solo pensarlo, construir y trabajar en hacer cosas para todos nosotros pues somos nosotros quienes lo hacemos y quienes vivimos.
Creemos que aquellos que no pueden levantarse no valen nada. Aquellos pueden ocupar los sofás. ¿O es que no lo ven?
Estamos absortos en el yo y es el todos el que nos motiva, el que nos mueve. El todo nos mueve. No podemos vivir en un estado del bienestar si no pensamos en el todo y para todos.
Hablaba de los que han dejado sus países por la guerra y sólo hemos hecho que sembrar desconfianza hacia ellos.
¿Que vamos a recoger de ellos si lo que sembramos es desconfianza?
Algunos dirán que todo esto parece muy bonito pero que no nos lleva a nada pues la realidad luego es otra.
La realidad es la que hacemos nosotros con nuestra forma de comportarnos.
La realidad es que los sofás siguen allí. Esa es la realidad.
Si sentáramos a esas personas en esos sofás, si trabajáramos codo con codo con ellos para hacer nuestros sofás, ¿Qué harían si no reír con nosotros una vez todos sentados?
Recuerdo ahora algo llamado endorfinas. Los científicos pueden dar buena cuenta de ellas y de cómo y qué producen cuando corren por nuestro cuerpo.
Cuanto padecer sin necesidad.
Aquí tiene una muestra de mis ideas. Mis disparatadas o chiripitifláuitcas ideas.
Saludos a todos.
Bravo, Carlos, has dado en el blanco:
1- Las políticas sociales las pagamos entre TODOS.
2- Cuando alguien recibe una ayuda, va al médico, a la escuela o utiliza cualquier servicio público o recibe un subsidio o ayuda es gracias a TODOS. No es un derecho adquirido, es algo posible gracias a los demás y no podemos perder de vista la Gratitud a TODOS los que sostienen cada cosa que se hace: desde las carreteras hasta cualquier tipo de ayuda y el respeto a la utilización racional de todos estos bienes.
3- Las subvenciones establecen incentivos y está claro que hay gente que hace sus cuentas y con la paguica van a desayunar todos los días al bar, con suerte pagan su casa, la comida la piden a Cáritas y ahí me las den todas. Mientras tanto, los que PAGAN se levantan cada día antes de las siete, toman un café en la cocina de su casa y trabajan todo el día. ¿Es eso justo?
4- Los recursos no son infinitos y se tienen que asignar con algún tipo de criterio, de eficiencia, de necesidad, de merecimiento si se me permite la expresión. Los cuidadores de personas dependientes por enfermedad física o psíquica, la dentadura de los ancianos por encima de los ‘derechos’ reproductivos de un homosexual.
5- Los incentivos deberían animar a hacerse hormiga y no cigarra.
Lo que se ha pretendido decir en el artículo es que seamos conscientes todos de la responsabilidad del buen uso que se da al conjunto de bienes y servicios con el que se prestan las ayudas.
No me gusta la idea de establecer dos frentes entre los que pagan esas ayudas y quienes las reciben, como si los que las proveen están en un lado, y los que las reciben en otro. Este debe ser un debate cerrado y antiguo.
A mi me parece excelente que esta sociedad se ocupe de grandes capas sociales desfavorecidas, y que sea a sí para siempre. No nos debe escocer destinar los fondos que sean necesarios para, por lo menos, paliar esos déficits, carencias y dificultades. Pero de la misma manera creo que no es adecuado que todo lo que supone ese «tercer sector» se constituya en un lobby que defiende más su mundo y sus intereses que la integración y capacticación.
Saludos